Consejos
útiles para protegerse contra la delincuencia organizada
Hasta hace pocos años
solamente los ricos empresarios y políticos de alto nivel tomaban medidas de
seguridad para protegerse; hoy con la excesiva inseguridad que hay en la
entidad, personas de clase media o pequeños comerciantes, son el blanco de la
delincuencia organizada.
La venta de
protección y la extorsión al sector más vulnerable de la sociedad, en ese
sentido, genera el terror y hasta la paranoia, ya que muchos, aunque no sea
así, se sienten perseguidos.
Cuando el rico es
perseguido tiene la opción de mudarse al extranjero, el pequeño comerciante o
el profesionista, no, y por ello debe de tomar medidas de autoprotección.
Alejandro Zúñiga
Alarcón, director general del Grupo Protege, una empresa de seguridad que da
servicio a compañías, elaboró un plan que contiene acciones para prevenir el
delito en el hogar y en la familia.
“Me refiero a puntos
muy básicos para poder evitar que nuestra familia, en nuestro hogar, en nuestro
negocio o en nuestra escuela podamos ser víctimas de la delincuencia. Nosotros
pensamos que la mejor persona para poder llevar a cabo una evaluación de
seguridad dentro de un hogar o una empresa somos nosotros precisamente, los
titulares de cada una de las casas, de los hogares.
“Necesitamos saber
qué es lo que está atrás de nuestra casa, quién vive a un lado, quién vive al
otro, qué factores existen de riesgo dentro de nuestra zona y eso lo podemos
llevar a cabo juntándonos con nuestros vecinos para platicar acerca de lo que
nosotros sentimos que pueda ser un riesgo o un factor de inseguridad para
nuestro hogar y familias”, dijo.
El plan consiste en
identificar todas las amenazas a las que está expuesta una familia, en su
hogar, en su sitio de trabajo y durante sus traslados, contemplando también sus
lugares de visita frecuente, como son el robo, asalto, secuestro, chantaje y
fraude, entre otros.
Incluye medidas
preventivas para evitar que estas amenazas se concreten y, en caso que así
ocurra, contemplar las medidas reactivas, es decir, tener un plan de manejo de
crisis, a fin de que las mismas afecten lo menos posible, tanto a la integridad
física de la familia, como a su patrimonio y su imagen ante la sociedad.
Debe contemplar
estrategias de comunicación con los familiares en las que se establecen códigos
secretos o claves, para alertarlos en caso de emergencia o bien constatar su
identidad en caso de una supuesta llamada de secuestro.
Es preciso incluir al
personal doméstico, así como choferes y escoltas en caso de contar con ellos.
Es conveniente contar con un consultor especialista de protección ejecutiva y
familiar que los guíe.
Ya identificadas
todas las amenazas a las que se está expuesto, se debe medir el riesgo, es
decir, la probabilidad de que dichas amenazas se concreten en afectaciones
reales, y para ello es necesario evaluar si la zona donde la familia vive es
peligrosa.
Si la casa cuenta con
chapas de seguridad, si las bardas de la vivienda son bajas, si las ventanas
del domicilio tienen protectores, además de verificar si la zona tiene alta
incidencia en robos a casa-habitación.
“Quien decide
irrumpir en una casa, primero observa la que ofrece mayores facilidades de
acceso, la que se percibe con mayor poder adquisitivo y en la que no saltan a
la vista, mecanismos ni políticas de seguridad.
“Revise
analíticamente su casa y piense por dónde pueden ingresar los delincuentes:
trepando por una barda, rompiendo un cristal o domo, escalando un árbol o
forzando una puerta. Una primicia de seguridad en casa es la protección de
perímetros y el cuidado de accesos. Por ello, instale una mirilla en la puerta,
cadena de seguridad y dos chapas, proteja domos y ventanas e ilumine su
fachada, instale luces con encendido automático al oscurecer y con sensor de
presencia para patios traseros y laterales, atranque sus puertas y ventanas”,
cita el documento del plan de seguridad.
La sugerencia es que
de acuerdo a sus posibilidades eleve bardas, instale equipos disuasivos como
alarmas y cámaras de circuito cerrado de televisión, coloque mallas metálicas o
electrificadas y letreros que pongan de manifiesto la presencia de sistemas de
monitoreo, alerta y vigilancia vecinal, e incluso tener un perro.
Sugerencias
- Bajar el perfil.
- No seguir rutinas en los traslados.
- Evitar hacer alarde de la situación financiera
familiar.
- Tener cuidado de las personas con las que se
tiene relación.
- Establecer controles de seguridad en casa.
- Adoptar estrategias y equipos de seguridad.
- Saber los teléfonos de amistades de sus hijos.
- Teléfonos de emergencia a la mano.
- Instruir a los hijos sobre aspectos de
seguridad del hogar.
- A la mano relación de tarjetas de crédito para
posible cancelación por robo.
- Tener plan de manejo de crisis.
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